jueves, 12 de diciembre de 2013

TRILOGÍA: PÍDEME LO QUE QUIERAS (Nº1)







PÍDEME LO QUE QUIERAS

Tras la muerte de su padre, el prestigioso empresario alemán Eric Zimmerman decide viajar a España para supervisar las delegaciones de la empresa Müller. En la oficina central de Madrid conoce a Judith, una joven ingeniosa y simpática de la que se encapricha de inmediato. Judith sucumbe a la atracción que el alemán ejerce s obre ella y acepta formar parte de sus juegos sexuales, repletos de fantasías y erotismo. Junto a él aprenderá que todos llevamos dentro un voyeur, y que las personas se dividen en sumisas y dominantes... Pero el tiempo pasa, la relación se intensifica y Eric empieza a temer que se descubra su secreto, algo que podría marcar el principio o el fin de la relación.




PÍDEME LO QUE QUIERAS AHORA Y SIEMPRE


Después de provocar su despido de la empresa Müller, Judith está dispuesta a alejarse para siempre de Eric Zimmerman. Para ello y para empezar a reconducir su vida, decide refugiarse en casa de su padre, en Jerez. Atormentado por su marcha, Eric le sigue el rastro. El deseo continúa latente entre ellos y las fantasías sexuales están más vivas que nunca, pero esta vez será Judith quien le imponga sus condiciones, que él acepta por el amor que le profesa. Todo parece volver a la normalidad, hasta que una llamada inesperada los obliga a interrumpir su reconciliación y desplazarse hasta Munich. Lejos de su entorno, en una ciudad que le resulta hostil y con la aparición del sobrino de Eric, un contratiempo con el que no contaba, la joven deberá decidir si tiene que darle una nueva oportunidad o, por el contrario, comenzar un nuevo futuro sin él. 



PÍDEME LO QUE QUIERAS O DÉJAME

Judith y Eric regresan de su viaje de novios tras una boda de ensueño. El se siente el hombre más feliz del universo y no se imagina su vida sin ella; sin embargo, los celos y el afán de protección de Eric los enfrenta una y otra vez.

Por su parte, Judith está encantada con su Iceman particular y siempre intenta verlo todo por el lado positivo, aunque en más de una ocasión se llene el cuello de ronchones…Disfruta de Eric y de sus juegos sexuales, excepto cuando él le susurra que uno de sus mayores deseos es tener un hijo con ella.


OPINIÓN

Libro 1. Pídeme lo que quieras

Pídeme lo que quieras nos muestra hasta que punto es importante saber disfrutar del morbo, dejar de lado los prejuicios y solo centrarse en el placer.

Los protagonistas de esta historia son Judith Flores, una española de 25 años, y Eric Zimmerman alemán de 30 años. Judith trabaja de secretaria en Müller, la empresa de la que Eric es dueño tras el fallecimiento de su padre.

Son polos opuestos, mientras que a ella le gusta la aventura, los deportes de riesgo, y es muy dicharachera, él no puede soportar ponerse en riesgo innecesariamente y no tolera que otros lo hagan.

Su primer contacto es en un ascensor, recurriendo a los manidos tópicos que nunca pasarán de moda, tras este, se sucederán otros muchos en archivos, despachos…aquí os dejo una muestra:

"Mi respiración se agita y Zimmerman sonríe desde su altura. Me pasa la mano por la cintura y me acerca más a él.
—¿Excitada? —me pregunta.
Lo miro y no hablo. No pienso contestar esa pregunta. Estoy avergonzada por lo que estamos presenciando los dos juntos. Pero sus ojos inquisidores se clavan en mí y él acerca todavía más su boca a la mía.
¿Cómo no excitarme con un hombre como ése encima de mí y ante una situación semejante? ¡A la porra el fútbol! Al final, vuelvo a asentir como un muñequito. No tengo vergüenza.
Zimmerman, al verme tan alterada, también mueve su cabeza. Mira por la rendija y me arrastra hasta quedar ambos delante del hueco de la puerta. Lo que veo me deja sin habla. Mi jefa se encuentra abierta de piernas sobre la mesa, mientras Miguel pasea su boca con avidez por la entrepierna de ella. Cierro los ojos. No quiero ver aquello. ¡Qué vergüenza! Instantes después, el alemán, que continúa agarrándome con fuerza, vuelve a empujarme contra el archivador y pregunta cerca de mi oreja:
—¿Te asusta lo que ves?
—No… —Él sonríe y yo añado entre cuchicheos—: Pero no me parece bien que los estemos mirando, señor Zimmerman. Creo que…
—Mirarlos no nos hará daño y, además, es excitante.
—Es mi jefa.
Hace un gesto afirmativo y, mientras pasea su boca por mi oreja, susurra:
—Daría todo lo que tengo porque fueras tú quien esté sobre la mesa. Pasearía mi boca por tus muslos, para después meter mi lengua en tu interior y hacerte mía. "

Después de presenciar ese espectáculo, Eric le pide, más bien exige una cita en ese instante. Judith se ve en la obligación de aceptar. Esa misma noche se le abrirán las puertas a un mundo desconocido para ella. Eric le propone una relación sexual donde no hay sitio para la vergüenza o el pudor. La lujuria y el morbo son los únicos ingredientes que tienen cabida entre ellos.

Junto a él aprenderá que todos llevamos dentro un voyeur, y que las personas se dividen en sumisas y dominantes.

Con el transcurso de los días, su relación, en principio, solo física, se va haciendo más intensa, hasta el punto de no poder esconder los sentimientos que se profesan.

Pero no todo es tan fácil como puede parecer, ya que los celos, los secretos y el fuerte carácter de Eric hará mella entre ellos hasta el punto de poner en riesgo su relación.

Bonita historia que desde el principio os mantendrá enganchadas a sus palabras. Como he dicho al comienzo presenta una visión del sexo donde lo importante es disfrutar y no dejarse llevar por convencionalismos e ideas preconcebidas. Los protagonistas de esta novela gozarán de los placeres del sexo, tanto en solitario, como en pareja o con alguien más, guiados en todo momento por el morbo que esto les produce y las ganas de jugar que tienen.

Megan Maxwell, en esta novela, nos muestra a una chica, fuerte, con carácter, que no se deja amedrentar, que sabe lo que quiere y lo que no. Este es uno de los puntos que más llamaron mi atención en esta novela, ya que a menudo las protagonistas de este tipo de novela son claramente mujeres sumisas que desde el principio se dejan llevar por los deseos de su “amo” y que no expresan sus opiniones tan claramente como Judith.


Libro 2. Pídeme lo que quieras, ahora y siempre.

En esta segunda entrega, la historia continúa.

Después de la gran discusión que la llevo a dejar Müller, Judith está más que decidida a cambiar de aires, dejar atrás su relación con Eric y los engaños de Betta. Así que decide viajar unos días a Jerez  para descansar de la vorágine que es su vida.

No tardará mucho en descubrir que no es tan fácil escapar de Eric. Él no se rinde y no está dispuesto a perder todo lo que tiene con ella por un engaño orquestado por su ex-novia.
Finalmente, y tras la insistencia de Eric, Jud deja de lado su cabezonería y decide darle otra oportunidad y acompañarle en su viaje a Alemania donde descubrirá como es la vida del hombre al que ama.

             Allí les esperan Flynn, el sobrino de Eric, hijo de su hermana fallecida Hanna,  Sonia y Marta, la madre y la hermanastra de Eric, que se encargan de cuidar a  Flynn mientras Eric está de viaje.

Pero no todos están contentos con su llegada. Flynn no acepta de buen grado que ella se mude a su casa y desde el momento en que se conocen tiene un comportamiento distante, no se dirige a ella, intenta acaparar a Eric todo el rato para hacerla sentir mal y así evitar que forme parte de sus vidas.

El resto de la familia la acepta, y se lo pasan muy bien con ella, por esto de que las españolas tenemos mucho arte y gracia.

Poco a poco, y con mucho esfuerzo, consigue abrir una brecha en el caparazón en el que se esconde el niño, ahora ha de intentar que no se vuelva a esconder otra vez y ganarse no solo su cariño, sino también su respeto y confianza.

Su relación como pareja sigue su curso y cada día están más unidos. Durante el día, Eric va a trabajar mientras que Judith se queda en casa, pero por la noche se unen y dejan que lo que sienten el uno por el otro les robe horas de sueño.

“—Todavía no me creo que estés aquí, pequeña.
—Tócame y créelo —lo invito, mirándolo a los ojos.
La excitación sube segundo a segundo y decido quitarle la sudadera.
Desnudo de cintura para arriba, a mi merced y con una sonrisa triunfal en mi boca, poso mis manos en su estómago y lentamente las subo hacia su pecho. En el camino, me agacho y su boca va a mi encuentro. Nos besamos. Sus manos cogen las mías.
—Eric..., me pones como una moto.
Él sonríe. Yo sonrío.
—¿Quieres que te muestre cómo me pones tú a mí? —me pregunta hambriento y jadeante.
—Sí.”

En ese segundo libro oiréis hablar del Sensations, un local de intercambio, en el que conoceremos a Björn, amigo de Eric, que tiene un libro aparte, llamado Sorpréndeme, que no os dejará indiferentes.

En este local se harán cosas que nunca hubieseis imaginado, o sí ;), pero no os cuento más para que os animéis y leáis =P

En esta segunda parte de la trilogía Pídeme lo que quieras cambiamos de país para conocer una nueva cultura y redescubrir a los personajes que tanto nos gustaron en la primera. Ahora no solo han de seguir consolidando su relación como pareja, sino que también han de convivir juntos día a día con los obstáculos que se les presentan.

¿Logrará Judith amoldarse a su nueva situación? ¿Aceptará Flynn a la pareja de su tío?

Libro 3. Pídeme lo que quieras o déjame

Después de una boda increíble, toca descansar y disfrutar de una merecida luna de miel.

En el viaje conocen a Juan Alberto y a Graciela, el primo y la asistente personal de Dexter. Dexter es un viejo compañero de juegos de Eric.

Graciela, está locamente enamorada de Dexter, pero este parece no querer reconocerlo. Con la ayuda de Judith, Graciela hará todo lo posible para que esta situación cambie.

Cuando regresan a Munich están pletóricos, llenos de energía y más enamorados que nunca. Todo es perfecto, ellos se quieren, y Flynn está contento con la situación y con sus nuevos papás a pesar de sus duros comienzos con Jud.
Todo es muy bonito, hasta que aparece Laila, la sobrina de Norvert (él y Simona se encargan de cuidar de la casa de Eric), quien rompe la burbuja feliz en la que están. Pero este no será el único problema Eric ha de ir a Londres donde está Amanda. Jud no está muy segura de las intenciones de la chica, aunque en múltiples ocasiones su marido le ha dicho, que entre ellos no hay nada más que una relación laboral.

Antes de su partida Eric recibe un vídeo que pondrá en peligro tanto su matrimonio como su amistad con Björn. Durante el viaje Judith no recibe noticias de Eric y está preocupada, hasta que  Amanda la llama desde Londres para decirle que Eric se encuentra ingresado en el hospital.

“Cuando termina Locura Esmeralda y quedo sola de nuevo en la habitación, me suena el móvil. Lo miro, no reconozco el número y contesto:
—Diga.
—Hola, Judith, soy Amanda.
La mandíbula se me desencaja. ¡La que faltaba!¿Qué hace esa mujer llamándome?
—No cuelgues, por favor, tengo algo que decirte.
—No tengo nada que hablar contigo.
Y cuando estoy a punto de darle al botón de colgar, oigo:
—Eric está en el hospital.
Mi respiración se detiene. Mi mundo se interrumpe, pero consigo preguntar con un hilo de voz:
—¿Qué… qué ha pasado?
—Hace unas noches bebió más de la cuenta y se metió en una pelea.
Dios…, Dios…, sabía que iba a pasar algo. Nunca lo había oído tan furioso.
—Pero… pero ¿está bien? —consigo balbucear.
—Todo lo bien que puede. Tiene una fisura en una pierna y varias magulladuras en el cuerpo.
Aunque…
—¿Qué ocurre, Amanda?
—Recibió un fuerte golpe en la cabeza y tiene hemorragias intraoculares en ambos ojos.
Me mareo…
Todo me da vueltas…
Los ojos… sus ojos…”

Esta es la tercera entrega de la historia de Judith y Eric, es agradable que en este libro nos muestren otra historia y no solo se centren en la principal. Os recomiendo leer esta novela (en verdad todas, porque solo leer esta no tendría sentido) ya que es la última y todos queremos saber cómo sigue la vida después del matrimonio y si podrán superar todos los contratiempos y sorpresas que les depara el futuro.

Aparentan ser una pareja sólida, pero a la mínima complicación lo tiran todo por la borda al dejarse llevar por los celos y los engaños de terceros. Se pasan todo el tiempo diciendo que confían el uno en el otro pero el mínimo indicio de problemas desconfían y no lo hablan como ha de hacer una pareja, sino que se encierran en ellos mismos y prefieren creer en lo que les dicen o lo que ven antes que en su pareja.

No solo vemos cómo evolucionan Eric y Judith. En esta parte de la historia también conocemos mejor a Raquel, la hermana de Judith, y a Björn.


Esta trilogía me ha gustado mucho, ya que Judith es una mujer en la que muchas de nosotras se puede ver reflejada. Me ha sido más fácil identificarme con la protagonista de esta novela que con otras. No sé si es por su fuerte carácter o por el uso de expresiones españolas que le dan un punto de gracia, pero Judith Flores es única.

No me puedo olvidar de Eric, que a partir de ahora ya forma parte del gran grupo de guapos millonarios de las novelas, como Gideon Cross (saga crossfire) o Christian Grey (50 sombras). Tiene una personalidad arrolladora, no permite que nada se le escape, y lucha por lo que quiere hasta el final.

Los dos son muy tercos y cabezotas, por lo que en más de una ocasión discuten. Pero cuanto mayor es la discusión, mejor es el sexo de reconciliación y ellos son unos expertos en reconciliarse.

Si os gustan las relaciones fuera de lo común, no seguir los convencionalismos y el placer que supone dejarse guiar por el morbo, la pasión y la lujuria, sin dejar de lado un hombre que sabe lo que quiere y no duda en ir a por ello, Pídeme lo que quieras os gustará.

Fdo: CRISTINA VILÀ





A pesar de las discusiones que provocan sus diferentes caracteres, el empresario Eric Zimmerman y Judith Flores siguen tan enamorados como el día en que sus miradas se cruzaron por primera vez. Juntos han formado una preciosa familia a la que adoran y por la que son capaces de hacer cualquier cosa. Flyn, aquel niño al que Judith conoció al llegar a Múnich, se ha convertido en un adolescente, y tal como les ocurre a la mayoría de los jóvenes, su vida se complica y afecta a todos los que conforman su entorno. El abogado Björn y la exteniente Mel continúan con su bonita historia de amor junto a la pinsesa Sami. Sin duda, la convivencia les ha beneficiado mucho. Pero hay algo que Björn no consigue de Mel: que se case con él. Las relaciones de las dos parejas van viento en popa. Se quieren, se respetan, nada parece fuera de lugar, hasta que de repente, personas y sorpresas del pasado irrumpen en sus vidas y lo ponen todo patas arriba. ¿Serán capaces de superar este giro inesperado? ¿Podrá con todo el amor que se profesan?; o, por el contrario, ¿cambiarán sus sentimientos para siempre? Si quieres averiguarlo, no te pierdas Pídeme lo que quieras y yo te lo daré, la esperadísima novela de Megan Maxwell más morbosa, erótica y sensual. 



VALORACIÓN